Muchas de las tradiciones japonesas todavía están vigentes y una de las que debemos saber para comportarnos debidamente, es la de no entrar en ciertos restaurantes, templos y demás lugares tradicionales, con nuestros zapatos, ya que existe la costumbre de quitarse los zapatos y entrar descalzos, con nuestros calcetines puestos.
Es importante saberlo para no romper la tradición y luego para poder llevar un calzado que resulte muy cómodo, fácil de quitar, pero también hay que llevar calcetines nuevo, porque es una prenda de ropa que te verán en estos sitios. Los zapatos, en estos sitios donde debes quitártelos, se dejan fuera, en una especie de armario, especial para los zapatos. Esta tradición sirve para no ensuciar el interior del local o de la casa con la suciedad del exterior.
Muchos turistas están temerosos ante el hecho de dejar sus zapatos o tenis fuera, pensando que se los pueden robar. En otros países no sería recomendable hacer eso, porque los zapatos no durarían medio segundo, pero en Japón, el respeto por las cosas ajenas es casi total, por lo que en contadas ocasiones pueden robar algunos zapatos, sobretodo en zonas más grandes y turísticas.