Japón ha vivido un nuevo terremoto, algo que no es ni mucho menos noticia en un país como Japón, pero sin embargo la intensidad es noticia, ya que se produjo un terremoto de magnitud 7,3, que puede ser más que suficiente para que pueda venir hacia Japón nada menos que un tsunami, que es lo que más temen los japoneses, debido a que para los terremotos ya están muy preparados, mientras que para los tsunamis es más complicado poder prepararse y quedarse a salvo, sobre todo cuando se producen olas de gran altura.

De momento no se han registrado datos como para que se confirme la llegada de un tsunami, pero lo cierto es que ha saltado la alarma justo después de terremoto. Lo más curioso es que los japoneses no temen tanto a los terremotos como temen a los tsunamis, que suelen ser muy destructivos y mucho más con las características de un país como Japón y a la altura que se encuentra. Esperemos que no venga tsunami alguno y que todo sea una nueva falsa alarma, que sería lo mejor para todos.

Todos sabemos que después de un gran terremoto puede llegar una gran ola en forma de tsunami y que son verdaderamente destructivos, algo que conocen en diferentes zonas costeras del mundo, que por desgracia han tenido que vivir las consecuencias de ver venir a una de estas olas gigantes, que son muy destructivas y que desde luego hacen un gran daño a las zonas a las que llegan, sobre todo por la gran altura.

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